Enric Colom Mendoza , 2023: Can Peixau, Figlinae Hispanae, https://figlinaehispanae.icac.cat/yacimiento/can-peixau/
DOI: https://doi.org/10.51417/figlinae_076
El centro productor de Can Peixau se encuentra extramuros de la ciudad de Baetulo, precisamente cerca de la vía que unía ésta con Barcino, por el punto más favorable del río Besós. A parte de esta figlina, M. Comas dio a conocer numerosos yacimientos, situados tanto en el casco urbano como en el área periférica de Baetulo, en los que aparecían abundantes restos de ánforas (Prevosti 1981a; Comas 1985; 1998). Las primeras noticias del yacimiento son de 1928 cuando J.C. Serra Ràfols hizo hincapié en la existencia de una villa romana en base al hallazgo de estructuras constructivas en los terrenos aledaños a la antigua masía de Can Peixau. Posteriores intervenciones, realizadas entre 1932-1934 por la Agrupació Excursionista de Badalona, pusieron al descubierto una importante villa romana del suburbium de Baetulo, con restos de estructuras arquitectónicas, pavimentos en opus sectile, opus signinum y opus tessellatum, así como restos de hornos cerámicos que, desgraciadamente, no fueron documentados y un campo de dolia. Durante los trabajos de demolición de la masía de Can Peixau, acontecidos en 1956, se llevaron a cabo nuevas excavaciones, dirigidas por J.M. Cuyàs, documentándose el vertedero cerámico de un centro productor de ánforas, así como nuevamente restos de hornos (Padrós 1998:185-186). La posible producción de ánforas en el área de Baetulo ya fue insinuada por J.M. Cuyás (1977) y R. Pascual (1977).
Hay que destacar que, en 1984 en un solar de la calle de Lladó de Badalona, aparecieron los restos de una industria urbana de producción de vino, con tres depósitos contiguos pavimentados con opus signinum, dos de ellos con el perímetro interno en forma de media caña y unas medidas para cada uno de ellos de 2,60 x 2,60 m. A muy poca distancia de éstos, apareció la impronta de un horno circular de muy pequeñas dimensiones (1 m de diámetro aproximadamente) que no está relacionado con la producción anfórica. Además, se documentaron dos alineaciones paralelas de ánforas Pascual 1, muy cerca del negativo que habría dejado una prensa romana (Puerta y Rodríguez 1987). Finalmente, la última excavación realizada tuvo lugar en 1996, en un área de 175 m2, en la que se pudieron conocer más detalles acerca de este centro de producción.