Mª Rosa Pina Burón , 2022: Malpica 3, Figlinae Hispanae, https://figlinaehispanae.icac.cat/yacimiento/malpica-3/
DOI: https://doi.org/10.51417/figlinae_027
El alfar de Malpica 3 se localiza a unos 5 km en línea recta al sureste de Palma del Río, en una finca dedicada a cultivos anuales. El yacimiento se extiende entre la orilla derecha del Genil y la carretera de Écija a Palma del Río, con una superficie aproximada de 3,3 ha (Bourgeon, 2022, 441).
Desde el siglo II d.C. perteneció a la familia de los Iuventii según la epigrafía de las Dressel 20 que pone de relieve el vínculo que existió entre este centro y los grandes talleres de Malpica 1 y Malpica 2, de los que tal vez pudo haber sido una sucursal (Bourgeon, 2022, 443).
M. Ponsich prospectó la zona de Cortijo de Malpica en la década de 1970, señalando en el sitio concreto de Malpica 3 “fragmentos de ladrillos y tejas sobre una vasta superficie” y “grandes bloques de piedra tallada” que atribuye a una villa romana (Ponsich, 1979, 123).
A comienzos de los años noventa C. Rico volvió a prospectar este ámbito del Genil en busca de alfares productores de material constructivo, observando en las inmediaciones del Cortijo restos de vajilla, tejas y ladrillos que interpreta como posible área residencial vinculada al centro alfarero situado a unos 150 m al sur (= Malpica 2) (Rico, 1994, 125).
En 2005 tuvo lugar una prospección preventiva previa a la instalación de la red de distribución de gas natural a la planta de Pascual en Palma del río, a lo largo de todo su trazado, entre la margen derecha del Genil y la carretera A-453, a cargo de Ernesto J. Toboso y Pilar Pineda. Constataron la presencia de dos yacimientos ya incluidos previamente en la Carta Arqueológica del Municipio, siendo uno de ellos el de Malpica 3, al que los autores denominan “zona 1” y en el que encuentran material cerámico rodado y disperso que atribuyen al alfar de “Cortijo de Malpica” (= Malpica 2) (Toboso y Pineda, 2010, 566).
O. Bourgeon prospectó el lugar en 2014, en el marco de su investigación doctoral y del proyecto OLEASTRO, caracterizándolo por primera vez como alfar independiente, a partir de los fragmentos de Dressel 20 y Dressel 23, dolia, restos de lebrillos sobrecocidos y hornos, y un lote de 12 asas con sellos. Documenta asimismo restos constructivos asociados a una posible almazara (fragmentos de hormigón hidráulico y laterculi de opus spicatum), fragmentos de vajilla y ánforas exógenas, que relaciona con un área residencial para los trabajadores del taller (Bourgeon, 2022, 441-443).