Mª Rosa Pina Burón , 2022: San Bartolomé, Figlinae Hispanae, https://figlinaehispanae.icac.cat/yacimiento/san-bartolome/
DOI: https://doi.org/10.51417/figlinae_028
El alfar de San Bartolomé se localiza dentro del cortijo homónimo a la altura del km 22 de la carretera de Écija a Palma del Río, junto a la margen derecha del Genil. El yacimiento ocupa una superficie aproximada de 2,5 ha (Bourgeon, 2022, 103).
Fue investigado por primera vez en 1975 por G. Chic, quien atribuye los restos de cerámica común, tejas y ánforas hallados en superficie a una posible villa romana (Chic, 1986,36), activa desde finales del siglo II d.C. y ocupada ininterrumpidamente hasta época árabe, según V. Durán y A. Padilla (1990, 112).
M. Ponsich lo prospectó de nuevo unos años más tarde, caracterizando el sitio como alfar de ánforas Dressel 20 en virtud de los “numerosos fragmentos de ladrillos, tejas, panzas y asas de ánforas olearias” que cubrían una superficie de más de una hectárea (Ponsich, 1991, 65).
En 2014 O. Bourgeon efectuó una nueva prospección sistemática del terreno, en el marco de su investigación doctoral y del proyecto OLEASTRO. Documentó restos arquitectónicos y cerámicos (fragmentos de mármol, opus signinum y sillares de piedra caliza, terra sigillata africana, cerámica africana de cocina y ánforas importadas, entre otros) relacionados con un núcleo de hábitat de tipo villa ocupado desde la primera mitad del siglo I d.C. hasta el siglo VII, así como vestigios de producción cerámica, destacando los fallos de cocción, los ladrillos vitrificados procedentes de hornos y los lebrillos-soporte, además de numerosos restos de ánforas, entre ellos, un conjunto de 17 asas de Dressel 20 con marcas de alfar (Bourgeon, 2022, 104-105). Según la autora, la epigrafía anfórica denota una estrecha relación con los talleres próximos de Alcotrista y San Rafael, pudiendo tratarse de un centro secundario dependiente de estos (Bourgeon, 2022, 106).