Enric Colom Mendoza , 2023: El Vilarenc, Figlinae Hispanae, https://figlinaehispanae.icac.cat/yacimiento/el-vilarenc/
DOI: https://doi.org/10.51417/figlinae_086
La villa del Vilarenc fue descubierta y excavada en 1883 por un grupo de aficionados a la arqueología de Vilanova i la Geltrú. Los excavadores se preocuparon únicamente por la recuperación de los objetos más llamativos y por la arquitectura de los restos, documentando un gran edificio de época romana que ocupaba una superficie de más de 1.000 m2, con una organización interna muy compleja y unas termas privadas bastante sencillas (Revilla 2006: 158). Una nueva excavación en el lugar en 1967 permitió descubrir un conjunto de tres cisternas para abastecer las termas, con una capacidad cercana a los 110.000 litros y construidas mediante un encofrado de mortero recubierto con opus signinum. Después de esta intervención, el Vilarenc quedó en el olvido, incluso el recuerdo de su localización exacta (Pou y Revilla 1996: 106). Entre los años 1988 y 1989 se excavó nuevamente, poniendo al descubierto un edificio de planta rectangular y, rodeando a éste, un conjunto de estructuras como vertederos domésticos e industriales y canales de drenaje relacionados con la explotación agrícola de la zona.
Las excavaciones iniciadas en 1991 y continuadas en los años 1993-1994 y 1997-1999, se centraron en el denominado Sector I de la villa, permitiendo establecer su evolución funcional y cronológica. Su fundación tuvo lugar en las últimas décadas del siglo I a.C. con la edificación del edificio de planta rectangular con un rico programa decorativo, y un complejo que albergaba una prensa y un lacus para la fermentación de vino (Revilla 2007: 199), pasando por la construcción de un área termal durante el primer cuarto del siglo I d.C., hasta el abandono y expolio de las mismas y el paso a unos usos artesanales relacionados con la forja a partir de mediados del siglo I d.C. Las últimas intervenciones arqueológicas tuvieron lugar entre 2001 y 2004 (Revilla 2006: 167).