Mª Rosa Pina Burón , 2022: Madueño, Figlinae Hispanae, https://figlinaehispanae.icac.cat/yacimiento/madueno/
DOI: https://doi.org/10.51417/figlinae_006
El alfar de Madueño se localiza a unos 800 m al sur de Palma del Río, en la margen izquierda del Genil, dentro de la finca El Sevillano, en un terreno elevado y alejado de la orilla del río, plantado de naranjos. Ocupa una superficie aproximada de 7.900 m2. En época romana pertenecería al territorio de Segida Augurina, dentro del convento astigitano.
Se trata de un taller modesto, que fabricó ánforas Dressel 20 desde mediados del siglo I d.C. hasta la segunda mitad del III d.C., y cuyos productos fueron escasamente difundidos.
El yacimiento fue descubierto por M. Ponsich en la década de 1970, quien lo identifica con una villa romana ocupada hasta el siglo IV d.C., a partir de la dispersión de restos cerámicos en superficie (ánforas, terra sigillata africana, material latericio) (Ponsich, 1979, 115).
G. Chic lo prospectó de nuevo en 1976 y recogió un asa sellada de Dressel 20, caracterizándolo entonces como alfar de ánforas (Chic, 1985, 50; 2001, 131-132).
Posteriormente, J. Remesal estudió un conjunto de 19 sellos sobre asas de ánforas Dressel 20 recuperados en el sitio y puestos a su disposición por el arqueólogo municipal de Palma del Río, Antonio León, y el grupo de trabajo asociado al Área de Cultura de dicho Ayuntamiento (Remesal, 1989, 137-140). Este corpus epigráfico es reevaluado en la obra de P. Berni (2008, 393-394).
En 2013 O. Bourgeon realizó nuevas prospecciones en el yacimiento de Madueño, confirmando la existencia de un alfar de ánforas Dressel 20, gracias al hallazgo de fallos de cocción, fragmentos de hornos y de barreños cerámicos empleados en el proceso productivo. La autora sugiere, a modo de hipótesis, la posible presencia de una prensa de aceite, dados los numerosos ladrillos de opus spicatum descubiertos, así como la referencia de M. Ponsich a un fondo de pileta de mortero hidráulico, si bien, no encuentra restos estructurales durante sus trabajos de campo (Bourgeon, 2022, 483-485).
