Ánforas
Dressel 20
En la primera fase de producción, los bordes de Dr. 20 pertenecen al tipo B de S. Martin-Kilcher caracterizadas por un borde redondeado con rehundimiento interno y asas altas de sección circular, a veces con cresta dorsal (Martin-Kilcher, 1987). Los pivotes son un pequeño cono truncado, con poca altura y coronado con una bola de arcilla.
Las ánforas asociadas a niveles de la segunda fase de actividad corresponden a la variante E de S. Martin-Kilcher, caracterizada por un borde triangular con interior cóncavo o rehundimiento interno y asas de sección circular (Bourgeon, et al. 2016, 320).
Aunque encontramos algunos pocos ejemplares de la variante E i un borde de la variante B, las ánforas de la tercera fase corresponden principalmente a la variante G, con borde triangular masivo. Los pivotes encontrados son típicos del s. III d.C., poco desarrollados, y las asas son de sección circular, anchas y cortas (Ibid., 328-9).
Datos cuantificados
Epigrafía
Primera fase
Se documentaron 27 sellos distintos, siendo GER’MA’ el más abundante. Aparecen también los sellos, SED.AVITI, y L(ucius).V(…) IVCV, ambos de miembros ciudadanos (Bourgeon, et.al., 2016, 315-6).
Tenemos también sellos de personajes no ciudadanos, de condición libre o más probablemente servil (officinatores): GERMA Y ROMANI.
Segunda fase
Esta segunda fase está fechada gracias a la marca FELIC., siendo la mejor representada del alfar, que se ha hallado en el Monte Testaccio y se datan en el año 145 d.C.
En el testar con UE 3051 se contabilizaron 303 ánforas Dr. 20E, con 191 sellos y 323 grafitos. Las estampillas encontramos 6 sellos distintos (que aparecen en otros contextos dentro del alfar), indicando los nombres de los officinatores: FELIC, PROTAE, ITALICI, ERMOGE, GELAD y TITY[R] o TITYR[E] (Bourgeon, et al. 2019, 282).
A parte de estos sellos, las ánforas presentan grafitos que debían referir-se a los trabajadores encargados de fabricar las partes del recipiente (asas, pivotes…) y que posteriormente unía el alfarero al cuerpo y el cuello. La finura de algunos de los grafitos digitales podría indicar la participación de niños y aprendices (Ibid., 282-3). No se puede afirmar completamente que cada sello (por tanto, cada officinator) tuviera asociado un único grafito (Fig. 11).
Tercera fase
En esta fase los sellos son especialmente numerosos. La mayoría (85 de 146) corresponden a dos variantes de la marca II IVN’ME’LISSI/ET MELISSE, y se desarrollan como Duorum Iun(iorum) Melissi et Meliss[a]e. Aparen en los testares, pero también en el horno 2 (Remesal y Blázquez 2010, no 375).
Aparecen de manera menos frecuente los sellos:
- CAMILI/SILVESTRI
- CORBEL, según Mayet y Etienne (2004, no 355) se debe leer Cor(neli) Bel(lici), ya que en una de las variantes constatadas se observa un punto. Se encuentra también en los complejos d’Alcotrista (a 2 km de Las Delicias) y a Azanaque-Castillejo en Lora del Río (a 35 km al SO) (Mauné, et al., 2014, 441).
- Del último sello solo se conserva la primera y la última letra: V[…], […]A.
Otras producciones
Lebrillos
Cerámica común
Los lebrillos encontrados en el vertedero de la primera fase (s. I d.C.) se caracterizan por ser troncocónicos con el fondo plano y a veces presentan un orificio de 3 a 4 cm, realizado durante su manufactura. Sus paredes son rectilíneas, tumbadas al exterior y terminan con un borde engrosado exvasado. Suelen presentar una gran homogeneidad morfológica, eran objetos producidos de forma rápida y poco cuidados, pero estandarizados: presentan un diámetro máximo en torno a los 38-40 cm, y una altura de unos 13 cm (Bourgeon, et al., 2016).
Esta morfología presenta cierta evolución, aunque se continúan encontrando recipientes con las características del s. I d.C. en las fases posteriores. Algunos de los lebrillos encontrados en contextos de mediados del s. II d.C. (segunda fase) presentan un borde redondeado, en cambio, los ejemplares de la última fase presentan paredes más rectilíneas, menos curvadas, y con diámetros mayores (internos entre 22 y 37 cm; y externos entre 34 y 37 cm). Sus paredes son más ligeras y presentan un borde más fino y mejor delineado, las bases son más finas (Ibid., …)
Respecto a su uso, J. Remesal Rodríguez propone que estos objetos servían como soportes de fabricación y cocción de las ánforas Dressel 20 (Remesal 1977-8, 94-95). R. Étienne y F. Mayet, en cambio, consideran que servirían para el montaje del cuello y las asas sobre la panza del ánfora, y para el posterior secado de la pieza (Étienne y Mayet, 2004, 57). En el caso del alfar que nos ocupa, se considera que tendrían un uso polivalente, para el montaje del recipiente oleario, pero también para estabilizar las ánforas dentro del horno (Mauné, et al., 2014., 426-7).
Fig. 13 . Lebrillos de la UE1310 (tercera fase). Dibujo: S. Corbeel i L. Trouvé; digitalización: S. Corbeel (Mauné et al. 2014, 437).
En el vertedero datado en la primera fase se contabilizaron un total de 160 lebrillos, que corresponden a un 51% del total de NMI. En el caso de las fases siguientes, el número de lebrillos encontrados es menor, llegando solo a un 15% NMI en el caso del vertedero de la tercera fase (Mauné, et al. 2014, 436).
EPIGRAFIA
Se han encontrado distintos graffiti i algún sello en los lebrillos. Los grafitos se encuentran en las paredes internas de los objetos, y mencionan nombres personales. Un ejemplo és ro[…], abreviatura de Romanus, que debe relacionarse con la estampilla ROMANI sobre ánfora Dr. 20, hallada en el mismo vertedero. Este grafito se encuentra también en un lebrillo de La Catria, no es imposible que se trate del mismo alfarero conocido en Las Delicias, cosa que indicaría una relación entre los dos complejos (Bourgeon, et al. 2016, 315).
Se ha encontrado únicamente un sello sobre lebrillo, la estampilla GE.HE, que también se conoce sobre una asa de Dr. 20 del mismo vertido.
Fig. 14 Lebrillos de la UE 2009/2069 (Primera fase). Dibujos: F. Bigot; digitalizacion: F. Bigot, J. Burlot, A. Negre. y S. Thiriet (Bourgeon, et al. 2016, 316).
Cerámica común
La cerámica común oxidada encontrada parece haber estado producida en el alfar, ya que presenta una pasta similar a la de las ánforas. El repertorio comprende copas, cuencos, tapaderas y jarras de cuello estrecho. Esta producción debió de ser anecdótica en comparación a las ánforas y los lebrillos (Mauné, et al. 2014, 424).
Fig. 15 Cerámica común de la UE 2009/2069. Dibujos: F. Bigot; digitalización: S. Corbeel, A. Négre, y V. Pellegrino (Mauné, et al. 2014, 424).